Estoy pensando en muchos de nosotros parados detenidos
ante un puesto de diarios y revistas cómo se nos escapan todas las cosas que
Ramonet está exponiendo. Al naturalizar el hecho de la existencia de esa
multiplicidad de publicaciones se deshistoriza, se desvanece el contexto
histórico que posibilitó que hoy estuviera a nuestro alcance una cantidad
inmanejable de información. Esta disponibilidad tiene sus más y sus menos[1].
Sigamos leyendo:
También tenía que existir un
material de bajo precio que permitiese precisamente que ese diario impreso se
vendiese a un precio barato. Ese material es el papel de nuevo tipo, el papel
de periódico, el papel hecho a base de pulpa de árbol y no el papel que existía
antes, que era a base de tejido y que costaba muy caro, que no hubiese
permitido tener periódicos de amplia difusión. Entonces hay que inventar ese
tipo de papel y también se necesita libertad, se necesita la libertad de
imprimir. Es interesante observar lo siguiente sobre este último aspecto, que
coincide con lo que estoy diciendo: Martí, joven de su tiempo, en cuanto las
condiciones estaban reunidas, es decir hay una imprenta que puede multiplicar
los diarios, hay una clase social, una categoría social suficientemente amplia
para leer, para saber leer la prensa y hay libertad; en ese momento, José Martí
crea su periódico.
Hay dos circunstancias en las que debemos
detenernos unos segundos para dimensionar la magnitud de lo que estamos
leyendo: hablamos de la edad de Martí, veamos ahora el momento histórico que
describe el disertante:
Digo es interesante observar
lo siguiente: ¿desde cuándo hay libertad de imprenta en Cuba? Bueno, la
libertad de imprenta, curiosamente, la da
un capitán general colonial, español. Se llamaba Domingo Dulce y firma
un decreto que por primera vez propugna la libertad de imprenta. ¿Cuándo lo da?
Lo da exactamente el 9 de enero de 1869. Cinco días más tarde, cinco días, José
Martí crea su periódico. O sea, como ven este joven era un joven que estaba
esperando con dieciséis años la oportunidad para intervenir y para crear un
periódico moderno.
Agrega, a su extremada juventud, dos
cualidades dignas de ser repetidas en las aulas donde se cursa la carrera de
periodismo y comunicación social: su exigencia de buena escritura y su
compromiso con la libertad de su patria. Por ello, el énfasis de la descripción:
No olvidemos que Martí será
esencialmente un periodista, un periodista obviamente comprometido, pero periodista,
periodista en EEUU para periódicos
norteamericanos, periódicos cubanos, periódicos mexicanos, venezolanos,
centroamericanos, argentinos, periodista que escribe en cantidad de diarios y
que vive la efervescencia que se vivía en el Nueva York industrializado,
nuevamente industrializado de aquel momento del siglo XIX. Es esencialmente un periodista.
Difunde esencialmente su idea, su manera de ver el mundo. Juan Marinello,
inmenso intelectual cubano, define de esta manera el trabajo de José Martí:
“Parece innegable que fue el periodismo, un periodismo distinto”… “en el que se
vuelcan el gran escritor, el gran revolucionario y el gran artista, el campo
donde José Martí alcanza su más alto nivel”. Efectivamente, como periodista;
como periodista comprometido.
Ramonet comienza a tender un puente entre
épocas para ir comprendiendo el proceso histórico, sus cambios permanentes,
pero también la exigencia de valores innegociables:
Martí no solo publica
principalmente en los periódicos la mayor parte de su obra, sino que ésta es
esencialmente una constante crónica periodística, en la que Martí no solo
recoge lo más importante de la actualidad política y artística de su época,
sino también los grandes acontecimientos históricos y también los pequeños
sucesos diarios. O sea que Martí se comporta como alguien que hoy mantuviese un
blog diario sobre lo que ve, lo que observa, lo que lee, lo que frecuenta,
etc., una especie de diario personal que es también diario de un testigo y,
siempre al servicio de causas nobles, evidentemente, con una alta concepción de
lo que debe ser el periodismo.
[1] Se puede consultar al respecto mi trabajo Sociedad, política y medios en la página www.ricardovicentelopez.com.ar
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